Vicente García Huidobro nació en Santiago en 1893. Hijo de padres pertenecientes a familias entroncadas con la aristocracia colonial, realizó sus estudios primarios y secundarios en el Colegio Jesuita de San Ignacio en Santiago.

En 1911 publicó Ecos del alma, poemas de juventud fuertemente influenciados por el modernismo en boga. En 1912 publicó la revista Musa joven y en 1913 dirige la revista Azul. Aparecen sus poemarios La gruta del silencio y Canciones en la noche. En 1914 lee en el Ateneo de Santiago su manifiesto Non serviam en el cual expresa por primera vez su pensamiento vanguardista y aspectos que derivarán posteriormente en su teoría del creacionismo. En 1916 publica Adán, poema en el cual aparecen rasgos de la corriente creacionista. En ese mismo año viaja a París y, de paso en Buenos Aires, publica El espejo de agua. En esa misma ciudad dicta una importante conferencia sobre su teoría poética en la que afirma que: "La primera condición del poeta es crear, la segunda crear y la tercera crear".

En París colabora con las revistas Sic y Nord-Sud dirigida por Pierre Reverdy. Se relaciona con importantes autores y artistas representantes de la vanguardia europea como Apollinaire, Tristán Tzara, Jean Cocteau, André Bretón, Louis Aragon, Picasso y Juan Gris, entre otros.

En 1917 publica los poemas en francés Horizon Carré, Hallaly Tour Eiffel y dos libros en español Poemas Árticos y Ecuatorial, este último, una visión apocalíptica de la Primera Guerra Mundial.

De regreso a Chile dirige Acción, Diario de purificación Nacional, cuyo primer número aparece en agosto de 1925. En 1926 publica Vientos contrarios, apuntes ensayos y aforismos, y en 1929 aparece en Madrid su novela Mío Cid Campeador en la que introduce la vanguardia en la narrativa latinoamericana. En 1931 publica la que es considerada su obra fundamental: Altazor o el viaje en paracaídas. Ese mismo año aparece en Madrid Temblor de cielo.

En 1941 publica dos de sus libros capitales de poesía: Ver y palpar y El ciudadano del olvido. Posteriormente viaja a Europa y participa con el grado de capitán en el ejército francés de liberación, estando presente en la caída de Berlín en 1944.

Vicente Huidobro murió en enero de 1948 en su hacienda de Llolleo. Ese mismo año su hija Manuela García Huidobro publicó los últimos poemas de su padre, donde figura el célebre monumento al mar.